La Liga Extremeña entra en un momento decisivo tras una primera jornada marcada por la igualdad entre los grandes aspirantes. CN Badajoz y AD Plasencia 96 protagonizaron un duelo directo de gran nivel que se resolvió por un margen muy corto a favor del equipo pacense, confirmando que ambos llegan dispuestos a pelear cada punto de la temporada. Cáceres, por su parte, firmó un sólido regreso a un podio de la jornada tras cuatro ediciones sin lograrlo, apoyado en un buen rendimiento general tanto en pruebas masculinas como femeninas.
Con la clasificación muy comprimida, llega ahora la segunda jornada, que se celebrará en Badajoz. Las inscripciones muestran la clara intención del CN Badajoz de hacerse fuerte en su piscina: plantilla amplia, especialistas en prácticamente todos los estilos y el objetivo evidente de ampliar su ventaja en la tabla. Los pacenses saben que esta es una ocasión clave para tomar impulso antes de entrar en la fase más exigente del calendario.
Plasencia, actualmente segundo, acude con la misión de mantenerse a la mínima distancia para llegar con opciones a la tercera jornada, que tendrá lugar en su piscina. Allí, ante su público y en un entorno donde históricamente rinden a un nivel muy alto, esperan poder recortar diferencias o incluso pelear por el liderato.
La cuarta jornada, que se disputará en Mérida en campo neutral, podría convertirse en un punto de inflexión si la igualdad se mantiene. Con Badajoz y Plasencia marcando el ritmo y Cáceres consolidándose de nuevo como un competidor serio para plazas de podio, sin olvidar a Mérida —gigante en letargo que en cualquier momento puede irrumpir en la pelea—, la Liga se perfila como una de las más abiertas y competidas de los últimos años.
Y, al estilo de Robe, queda claro que aquí nadie viene a pasearse; todos entran a la piscina dispuestos a dar guerra, porque cada punto cuenta y cada jornada puede cambiarlo todo.
En cuanto a la participación, teneos buenas noticias, ya que se mantiene estable en esta 2º jornada.
En el tema de horarios se nota un empeoramiento respecto a la primera jornada. Pasamos de unas 2 horas y media muy cómodas a unas 3 horas y media en esta segunda, y las razones pueden ser varias. Más allá de que nademos en 6 calles (Mira que a mí me hace ilusión nadar en la primera piscina en la que competí fuera de Plasencia, allá por el otoño del 91… pero soy de los que piensa que para utilizar las piscinas de 6 calles hay que doblar sede en las jornadas de Liga, competiciones mas cortas, viajes mas largo, piscinas mas utilizadas, y posibilidad de expansión: Moraleja, Miajadas, Villanueva de la Serena, Zafra... ), influyen sobre todo las pruebas “controlables” por casi cualquiera: los libres, las cortas de braza y quizás de espalda, que siempre arrastran mucha gente, en esta jornada solo tenemos 200 libres y para estar sola, es una prueba larga que pesa en el horario, porque la corta es 50 mariposa, que no es precisamente para todos los públicos. Resultado: todo el mundo acaba metiéndose en el 200.