Aunque este tipo de consejos la mayoría de nadadores ya los cumple. Están, quizás, más enfocados para nadadores mas novatos, si bien es verdad que algunas veces los nadadores nos centramos en demasía en la mejora de nuestros tiempos entrenando, alguna veces nadamos mas con el corazón que con la cabeza y es cuando cometemos errores técnicos tan básicos como pueden ser estos. Está claro que hay que mantener la concentración, y no nadar con nadar, y que con la mejora técnica se consiguen grandes avances.
En primer lugar quería prestar atención a controlar la respiración, el cuerpo debe queda alineado, nuestra cabeza debe permanecer alineada con nuestra espina dorsal, y a la hora de dar la brazada tenemos que girar la cabeza y coger aire del lado con el que damos la brazada.
Sobre el batido, tenemos que dar las patadas propulsoras con la cadera y no con el tobillo, se trabaja en exceso el cuádriceps aumentando de esta manera la fatiga y perdiendo fuerza fácilmente. Para evitar esto es importante que iniciemos el movimiento desde la cadera con golpes rítmicos y controlados, evitando los golpes desproporcionados que nos restan fuerza y aguante. Debemos aprovechar la fuerza de muslos y caderas.
Por último aumentar la calidad de la brazada, concentrar nuestra fuerza en los antebrazos, no solo en nuestras manos, ya que son más fuertes y aguantarán mejor el empuje. Para ello la mano y el antebrazo deben formar un bloque que hay que mover en conjunto, conseguiremos una brazada más efectiva.
Como veis, son cosas muy básicas y que quizás no caemos en ellas en el entrenamiento pero que debemos prestar atención para no caer en errores básicos.
En primer lugar quería prestar atención a controlar la respiración, el cuerpo debe queda alineado, nuestra cabeza debe permanecer alineada con nuestra espina dorsal, y a la hora de dar la brazada tenemos que girar la cabeza y coger aire del lado con el que damos la brazada.
Sobre el batido, tenemos que dar las patadas propulsoras con la cadera y no con el tobillo, se trabaja en exceso el cuádriceps aumentando de esta manera la fatiga y perdiendo fuerza fácilmente. Para evitar esto es importante que iniciemos el movimiento desde la cadera con golpes rítmicos y controlados, evitando los golpes desproporcionados que nos restan fuerza y aguante. Debemos aprovechar la fuerza de muslos y caderas.
Por último aumentar la calidad de la brazada, concentrar nuestra fuerza en los antebrazos, no solo en nuestras manos, ya que son más fuertes y aguantarán mejor el empuje. Para ello la mano y el antebrazo deben formar un bloque que hay que mover en conjunto, conseguiremos una brazada más efectiva.
Como veis, son cosas muy básicas y que quizás no caemos en ellas en el entrenamiento pero que debemos prestar atención para no caer en errores básicos.
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